Insignia de la chirigota "Ni se te Ocurri"
Ubrique, Carnaval 2011
Por Esperanza Cabello
Han sido muchísimas las veces que nos hemos planteado que nuestro padre merece un reconocimiento público por el gran trabajo que hizo por nuestro pueblo y nuestro patrimonio durante toda su vida, y otras muchas nos hemos quejado de que las autoridades se ahogan en consideraciones políticas y no son capaces de reconocer públicamente los méritos de las personas si sus ideas no coinciden.
Pero afortunadamente hay algo más que las autoridades: estamos todos los habitantes del pueblo, y muchos somos capaces de reconocer la valía de las personas por encima de otros miramientos.
Nuestro amigo Juan Pan, de la chirigota "Ni se te Ocurri", nos ha hecho esta mañana el mejor de los regalos, una letrilla de su chirigota dedicada a nuestro padre:
La historia de mi pueblo
Por muchos fue contada
Sin embargo hubo alguien
a quien le entusiasmaba
Con su Misión Rescate
Al mundo nos mostraba
Enseñando a viejos y niños
Que Ubrique había sido romana.
Don Manuel Cabello fue
El maestro al que entregué
Tos mis dominios Ocurritanos
Siempre supo defender
Ante algún bárbaro cruel
Todo el legado de mi pasado
Devolviste el esplendor a nuestra tierra
Donde algunos solamente vieron piedras
Delante de tus paisanos
Hoy quiero homenajearte
Levantando mi estandarte
Gran Cónsul Ocurritano
Don Manuel Cabello Janeiro
Por muchos fue contada
Sin embargo hubo alguien
a quien le entusiasmaba
Con su Misión Rescate
Al mundo nos mostraba
Enseñando a viejos y niños
Que Ubrique había sido romana.
Don Manuel Cabello fue
El maestro al que entregué
Tos mis dominios Ocurritanos
Siempre supo defender
Ante algún bárbaro cruel
Todo el legado de mi pasado
Devolviste el esplendor a nuestra tierra
Donde algunos solamente vieron piedras
Delante de tus paisanos
Hoy quiero homenajearte
Levantando mi estandarte
Gran Cónsul Ocurritano
Don Manuel Cabello Janeiro
No tenemos palabras para dar las gracias por este reconocimiento. En realidad estos son los homenajes que a nuestro padre le gustarían. Él era carnavalero, le encantaban las chirigotas y se divertía como nadie con las letras. Le encantaba la Petacabra y las comparsas, le encantaban los coros y los cuartetos.
Muchas gracias, Juan, y muchas gracias a todos los que, vestidos de romanos y con el toro del la bajada a Ocurris "tuneao" como insignia, habéis tenido un recuerdo para este ubriqueño. Gracias de todo corazón.
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Como decimos los carnavaleros... "Si no te sacan en una letra de carnaval es que no existes".
ResponderEliminarPodéis estar orgullosos de vuestro padre, un hombre tan culto y tan interesado por su pueblo, que sigue existiendo y al que cada vez vamos conociendo más gracias a vuestro blog.
Un abrazo,
A.V.