Votando en la Ermita de San Pedro

 Interior de la Ermita de San Pedro

22 de mayo de 2011

Por Esperanza Cabello

Poco podrían imaginarse don Miguel de Olivares y don Pedro Romero que la Ermita de San Pedro, que ellos fundaron y construyeron allá por 1800, serviría en el año 2011 como colegio electoral para las elecciones municipales  en una democracia.

Tampoco podría haberlo imaginado ningún ubriqueño en los últimos años, a juzgar por el estado de abandono en el que se encontraba el edificio. 

Pero así son las cosas, en esta mañana de votaciones los ubriqueños nos hemos dispuesto a participar, y la estrella del día ha sido la ermita, no sólo porque la han habilitado como colegio electoral, y los que vivimos en el casco antiguo teníamos que votar en ella, sino porque va a estar toda la jornada abierta, y muchos vecinos de otros barrios han venido también a visitarla.

 Los vecinos han venido a ver el interior de la ermita

Parece que hoy estamos más participativos que en otras elecciones, al mediodía ya había votado casi el cincuenta por ciento del electorado, y todo se está desarrollando sin ningún tipo de problemas. Está claro que las elecciones municipales son muy importantes, y no queremos perder la oportunidad de apostar por un pueblo mejor cada día.

Votando en la Ermita de San Pedro

Nosotros llevábamos en la papeleta, además de la correspondiente lista de concejales y concejalas, una especie de "Carta a los Reyes Magos" imaginaria, con varias peticiones especiales.

Sabemos que el próximo equipo de gobierno, sea el que sea,  trabajará con todas sus ganas por hacer de nuestro pueblo un lugar mejor, que luchará contra el paro, que mejorará  el turismo, que se preocupará por los jóvenes, por los mayores, por los que estén en circunstancias especiales. 

Sabemos que desde el próximo equipo de gobierno todos se preocuparán  por mejorar nuestras calles, nuestras carreteras, que intentarán darnos mejores servicios, más prestaciones sanitarias.

Lo que no sabemos es si el próximo equipo de gobierno apostará con fuerza por la cultura y el patrimonio, y queremos que los nuevos gobernantes apuesten también por esto.
Hay muchos elementos arquitectónicos que, sin tener la importancia de la Ermita de San Pedro o la de San Juan, son muy importantes para todos nosotros, son obras de ingeniería civil y pequeños trabajos realizados hace siglos que se están deteriorando irremisiblemente y que podrían arreglarse con unas cuantas jornadas de trabajo.

¡Apuesten ustedes por ellos también, futuros gobernantes de Ubrique! 

Apuesten por recuperar el puente de Barrida,

El pozo de Santa Lucía, el "puentecito romano" del naranjal, la cruz de la Viñuela, o la del Benalfi, y, por supuesto, el Rodezno.

No olviden ustedes que nuestro pueblo necesita conservar su identidad, su idiosincrasia, y con pequeñas cosas podremos contribuir a preservar nuestro patrimonio.

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