El recorrido por la Sierra de Ubrique comienza entre Villaluenga y Benaocaz
Fotografía: Leandro Cabello
Por Leandro Cabello
Hace unos meses me comentaron que estaban reparando los aljibes de la sierra de Ubrique en la zona que gestiona la Agencia de Medio Ambiente y que se encuentran en la parte más alta de la Sierra de Ubrique. De modo que pensé que era una buena ocasión para visitar el lugar. Es una excursión que tenía en mente, porque hacía varios años que no subía.
El camino comienza en la zona del Cintillo y aunque el desnivel que hay que salvar es grande yendo despacito y contemplando la naturaleza se puede subir sin problemas. Este camino lo agrandaron en la década de los 70.
El camino comienza en la zona del Cintillo y aunque el desnivel que hay que salvar es grande yendo despacito y contemplando la naturaleza se puede subir sin problemas. Este camino lo agrandaron en la década de los 70.
Hice un alto en en camino para empezar a fotografiar el magnífico paisaje. Llegando arriba se ven las casas de la zona de la Carretera Nueva en Ubrique, y a la derecha el Salto de la Mora, lugar donde se encuentran las ruinas de Ocurris. Al l fondo se distingue con claridad la sierra de la silla.
Al llegar a la placa de telefónica se obtiene esta magnífica panorámica de Ubrique.
La placa la instalaron aquí para reflejar las ondas hacia el edificio que se encargaba de las comunicaciones en Ubrique, nuestro pueblo siempre ha tenido "problemillas" para recibir las señales y las primeras emisiones de televisión se recogieron con las antenas colocadas en la Cruz del Tajo y en la Cruz de la Viñuela.
Y, lo que son las cosas, con el tiempo todo el mundo llama a esta zona "la placa", sea cual fuera su nombre primitivo.
Un poco más arriba nos encontramos con los cortados de la sierra y con una vista impresionante. Por la parte inferior pasa la vereda que usan los corredores de carreras por montaña como “pista” de entrenamiento.
Cuando se llega al Paso de los Contrabandistas termina la subida, prácticamente hasta aquí
llegaron haciendo el carril y aunque pretendieron seguir la tarea se
convirtió casi en imposible. Dejamos atrás la angarilla que impide el paso del ganado y subimos a lo más alto.
Si miramos a la izquierda al llegar a
la meseta de la Sierra Baja veremos la falda del Atochar y a mitad de
la ladera se encuentra el punto más elevado del término de Ubrique,
con unos 1079 m, según los mapas topográficos. Este será el motivo
para otra excursión y medirlo con exactitud (si me prestan un GPS)
Pero cogiendo el camino hacia la
derecha, por la vereda en la que se puede ver la "terra rossa" que es
el resultado de la disolución de las calizas, formado por arcillas de decalcificación, rica en óxidos de hierro, de ahí el color rojo característico.
Se llega al primer aljibe, aunque
he preguntado no me han dicho que tenga nombre, de modo que me
abstendré antes de aventurarme a dar un nombre (los topónimos y yo
no nos llevamos bien).
Es el que tiene más capacidad de los
tres que se pueden ver en este paseo y se construyó, como el camino
de subida, en la década de 1970 cuando este espacio lo gestionaba el
ICONA.
Recientemente le han instalado una bomba para
facilitar la extracción del agua. Es una buena idea, aunque está desconectada para que
no se derroche. Aquí, como en otras partes de la sierra, el agua es un tesoro, imprescindible para el ganado.
Siguiendo el camino se llega al
segundo aljibe. este aljibe es "el de Sierra Baja", así lo han denominado cuando lo han
restaurado (algunos lo llaman el aljibe del Bombo).
Pero ya digo que por
culpa de un nombre no quiero perder la amistad con nadie, así que ahí dejo los dos nombres.
Debajo de
los cortados hay otro aljibe que también le dicen el del Bombo. ¿Imaginan por qué? Porque debe de haber alguna oquedad en el subsuelo, y si saltas con fuerza en el llano que hay junto al aljibe el suelo retumba, como si fuera un bombo.
Los nogales (cuando hice las fotos sin
hojas) se sembraron también en los 70 y son motivo de peregrinación
de ubriqueños a recoger las nueces en otoño aunque cada vez las
recolectan estando más verdes.
Esta es la zona en la que se recoge el agua y
se conduce hacia el aljibe (algunos lo conocen también como el aljibe de los nogales)
Dando la vuelta se llega al tercer
aljibe. este depósito de agua está junto a una casa que encontramos en los mapas y consta como la casa del "Algarrobal". Es es una construcción antigua y se ve que los
nogales tienen más de 40 años.
Precisamente al fondo del llano se ve el cerro del Algarrobal (del mismo nombre que la casa) que aparece como la mayor altura del término municipal de
Ubrique con 942 metros.
Comenzamos el camino de vuelta. El sol de la tarde ilumina
los majestuosos cortados de la sierra de Ubrique. Esta zona la conocemos como "La Merga" , aunque la Merga es exactamente el lugar por el que se puede subir la falla, aunque es una subida muy peligrosa. Bajar es aún más peligroso, así que les recomiendo que, si no son muy montañeros mejor no lo intenten.
Mirando hacia atrás encontramos un pequeño salto en las rocas, como un "Salto del Cabrero" en pequeño, y a la izquierda está el camino hacia Agua Nueva por el que he subido y me dispongo a bajar. Los de la
carrera por montaña "Sierra de Ubrique-Benaocaz" también toman ese
camino aunque un poco más rápidos.
Es un lujo que miremos donde miremos vamos a encontrar rocas de todos los tamaños, a veces en formaciones curiosas, a veces medio caídas, pero siempre ofreciéndonos un espectáculo natural.
Y un poco más abajo llegamos a Vega Redonda. Es un lugar
de partidos de fútbol de los zagales y no tan zagales ubriqueños
cuando querían jugar en un campo de hierba. Rápidamente se organizaba un partido, y todos subían hasta Vega Redonda, jugadores y espectadores, en un santiamén.
La excursión ya va llegando a su término, regreso al punto de partida y paso junto a Agua Nueva, el lugar en el que se comenzó la construcción de un hotel a finales de los sesenta, hotel que nunca terminó y que aún sigue, como un fantasma, junto a la carretera.
Como no tengo fotos utilizo la publicidad que hicieron sobre la nueva zona
turística fotografiada del programa de la feria de Ubrique de 1970
Este edificio representó para toda la Sierra la modernidad, se contruía con todo tipo de lujos y comodidades, para atraer a un turismo de calidad. Hasta vino un ministro a visitar las obras.
Pero nunca se terminó de construir, y actualmente es solo una triste ruina.
Nuestra excursión por la sierra de Ubrique termina aqui, cerca de Benaocaz, nos vamos impresionados, como siempre, por nuestra majestuosa Sierra
.