Muchísimas felicidades, Curro

Curro rodeado de las mujeres de su familia

¡Feliz cumpleaños!

Por Esperanza Cabello 

Ayer tuvimos la fortuna de asistir a una fiesta de cumpleaños muy especial: era el cumpleaños de Curro Rodríguez González, nuestro Curro, que llegaba a su mayoría de edad.

"¡Feliz!"  Esa era la única palabra de su madre, nuestra amiga Pepa, junto a esta magnífica fotografía. Y esa es la palabra que lo resume todo: felicidad.

Porque cumplir dieciocho años es, sin duda, un momento muy especial en nuestras vidas, nos convertimos en mayores de edad, podemos votar, podemos conducir, vamos a la universidad, podemos dar el salto a una vida de adultos que a veces se antoja maravillosa y a la que poco a poco le iremos cogiendo el pulso.

Y si además cumples esos años rodeado de cientos de personas que te quieren, que te manifiestan su admiración y su cariño de todas las formas posible, eso es, sin lugar a dudas, un privilegio como pocos.

 Una de las tartas de cumpleaños

Los amigos prepararon tartas para todos los gustos

Cuando supimos que el cumpleaños se celebraría este sábado, poco nos imaginábamos que seríamos testigos de unos momentos tan emotivos, tan agradables, tan felices y, sobre todo, tan cercanos.
Todo estaba pensado y preparado con tanto detalle, con tanto cariño, que por fuerza, a pesar de los nervios y de los imprevistos, tenía que salir no solo bien, sino muy bien.

 Preparando la fiesta

Toda la familia y los amigos colaboran

La fiesta se celebraba en los salones del Hotel Ocurris, y todos pusieron su granito de arena, su esfuerzo y su alegría para que no faltara ni un solo detalle. Unos amigos se ocuparon de la comida (por cierto, para un par de regimientos), otros de la decoración: globos, golosinas, carteles, colección de pins, mesas; también de la barra, de la música. Es increíble la cantidad de cosas que se pueden preparar para un momento así.

 Margarita y sus nietos ubriqueños

No había abuela más feliz

Lo que más nos llamaba la atención, sin que sea sorpresivo, es la cantidad de gente, de amigos y familiares que comenzaron  a reunirse allí. Todos guapos y felices, dispuestos a demostrar su cariño no solo a Curro, sino también a su familia, a esas personas tan encantadoras y tan agradables que son los Piñero, los Rodríguez, los González y los Salguero. Son realmente un ejemplo de familia, todos a una, siempre, y lo que es mejor, con una sonrisa y con una palabra agradable para todos.

 Todo preparado para el gran evento

Golosinas y tartas para todos

Después, poquito a poco, nos fuimos fijando en los detalles y el los invitados. Los amigos de los padres y los amigos de los hijos. Allí estaban todos, dispuestos a celebrarlo y a pasarlo bien. Nos encantó ver el cariño que todos le demostraban.

 Todos los amigos acompañando al homenajeado

Casi terminada la cena, y antes de las tartas. Llegó el momento de la emoción. Rafael Ramos fue el encargado de hacer el retrato de Curro y transmitirle todos los buenos deseos que teníamos para él. Como buen escritor (en este enlace), nos emocionó con ese relato que hizo de aquel niño alegre y travieso que se había hecho acreedor al cariño de todos.

 Fotos, risas y alegría

Después llegó el momento de las fotos, lo que más nos llamó la atención fue la cantidad de amigos y amigas que se iban descubriendo a medida que pasaba la proyección. Amigos y más amigos siempre en buenos momentos, carnavales, fiestas, clases, viajes. Y aunque hemos sido testigos de muchos de esos momentos mientras Curro estaba en el instituto, nunca nos hemos parado a pensar que realmente eran momentos muy especiales. Los amigos no dejaron ni uno de esos momentos en el tintero.

Todos encantados con la gran fiesta

Terminada la cena, los discursos y las fotografías, llegó el momento del "Cumpleaños feliz" y las tartas. Toda una celebración. 
Pero de todo esto, como decía nuestra amiga Margarita Piñero, lo mejor es que todos los que estaban allí eran personas que querían a Curro, que todos habían ayudado para que fuera realmente un día muy especial, que la familia se había volcado, y que los amigos, que son amigos de verdad, se habían esmerado para que fuera un día feliz.

 18 años no se cumplen todos los días

¡Muchas felicidades, para hoy y para siempre, Curro!

Para nosotros ha sido una gran alegría poder participar en esta fiesta. Y mejor todavía ver cómo Pepa, Margari, Claudia, Paula, Margarita, Juan y Manuel han sido, como siempre, la familia que todos querríamos tener, y han logrado hacer que sea un día muy especial para una persona muy especial.
¡Enhorabuena a todos!

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