Nuestra Señora de las Nieves

Nieves Rubiales con 19 años  

Por Esperanza Cabello

Hoy es el día de Nuestra Señora de las Nieves. Es el día de recordar a una de nuestras personas favoritas: nuestra tía Nieves Rubiales. Fue esposa de nuestro tío Baldomero Fernández, hermano de abuela Natalia, y prima de nuestra abuela Julia.

Tita Nieves, madre de Eduardo, Pepe y Luis Miguel, era una persona entrañable y cariñosa, buena persona y acogedora donde las haya, se dedicó en cuerpo y alma a su familia y repartió su cariño a manos llenas.

Excelente cocinera y repostera, heredó las recetas de las Piñeritas y las desarrolló tan magistralmente como nuestra abuela. Solo tenemos de ella recuerdos entrañables y buenos.

Al reflexionar un poco sobre su nombre y apellido "Nieves Rubiales" nos hemos dado cuenta de que tita Nieves reunía en su nombre dos antiguas historias del pueblo. La primera la de los Rubiales: somo todos herederos de un mismo Rubiales, que seguramente habría recibido su apellido a partir de una cualidad física: ser claro de piel y pelo. Y esa característica física debía de ser dominante, porque a pesar de que nos hemos mezclado con personas morenas, nuestros genes de piel clara y ojos azules se perpetúan generación tras generación.

Y la segunda es la de otra persona de piel clara, una mujer llamada Nieves que dio nombre a la calle Nevada de Ubrique. Retomamos esa historia de esta entrada:

...una de esas páginas que hacen historia; la página en la que se explica el origen del nombre de la calle Nevada de Ubrique:

Manuscrito de Rafael Aragón Macías

BMU

Diego Gómez, segundo hijo de los dichos Juan Romero, y María Hernández casó (L2, 56 año 1628) con doña Silvestra, su prima segunda, con vrebe por ser hija de María de las Nieves, ápellido, que le dieron por ser muy blanca, y oy retiene el nombre de Nevada la calle donde tenía sus casas, y de Christoval Benitez y la dicha Mariniebes fue hija legítima de matrimonio de Alonso Carabajal y María Sánchez, hija de Pedro Borrego, y Ana López, hermana de Juan Gómez el Manco.

 En este extracto sabemos que Diego Gómez, hijo de Juan Romero y María Hernández (los apellidos en el siglo XVI eran un verdadero galimatías), se casó en 1628 con su prima segunda, llamada Silvestra.

Doña Silvestra era hija de María de las Nieves, señora llamada así por ser muy blanca, y en el momento en el que el escritor de esta parte del manuscrito redactaba su texto (en el siglo XVIII)  aún conservaba el nombre de Nevada la calle donde María de las Nieves  tenía sus casas.

María de las Nieves había sido hija legítima de Alonso Carabajal y María Sánchez, esta última hija de Pedro Borrego y Ana López (hermana de Juan Gómez el Manco).

Así pues la calle Nevada de Ubrique, que aún conserva su nombre, se llama así porque en ella tenía sus casas una señora que había sido llamada María de las Nieves a causa de su piel tan blanca. Parece una historia de cuento, pero es una historia real.

Ahora nos queda saber si esta señora tan blanca tuvo descendencia también clara y de pelo rubio, y si de ella viene la familia Rubiales... es que no hemos podido dejar de pensar en nuestra tía Nieves ¿Y si ella fuera descendiente de esta Nieves también? Bueno, aún vamos por 1628, cuando vayamos avanzando en el tiempo sabremos más cosas. 

 

 

 

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