Fotograma del video de la suelta de toros 2017
(Pinchar en este enlace para ver el video completo)
Por Esperanza Cabello
Hay cientos, miles de personas, entre las que afortunadamente nos encontramos, que se sienten, nos sentimos, muy orgullosas de ser de Ubrique.
Ubrique es un pueblo de la Sierra de Cádiz con sus luces y sus sombras, como cualquier otro pueblo, pero aquí hay muchas más luces que sombras desde siempre:
Nuestro trabajo artesano, nuestra dedicación a las tradiciones, nuestro paraiso natural, nuestro yacimiento de la Ciudad Romana de Ocurris, nuestros pintores y artistas, nuestro museo de la piel, nuestro museo del San Juan, nuestros edificios, nuestros gamones y la noche de los fuegos, nuestra biblioteca, nuestra escuela de artesanos de la piel, nuestros carnavales, nuestra Semana Santa, nuestros romanos, nuestras Nutrias Pantaneras, nuestros escritores, nuestros universitarios, nuestros músicos, nuestras bandas, nuestra escuela de música, nuestras escuelas e institutos, nuestros paseos al pantano, nuestros gañotes, nuestra Patrona, nuestra romería, nuestra feria, nuestros hijos ilustres, nuestros hijos sencillos, nuestros grupos de teatro, nuestros fotógrafos, nuestros belenistas, nuestro club de cine, nuestros ciclistas, nuestras escuelas de danza, nuestros gimnasios, nuestras asociaciones solidarias, nuestro Salto del Gamón, nuestra Peña Flamenca, nuestros clubes de lectura, nuestras carreras automovilísticas, nuestros poetas, nuestras poetisas, nuestros libros dibujados, nuestra ermita de San Pedro, nuestro Jardín, nuestros senderistas, nuestras hermandades, nuestras asociaciones de vecinos, nuestra alegría, nuestra avenida llena de vida día y noche...
Las sombras son más tristes, hablan de condiciones laborales de los petaqueros y petaqueras, de tasa de paro, de falta de algunas infraestructuras y problemas que preocupan a la población, y contra estas sombras trabajan muchas personas a diario con los medios de que disponen, cada uno en su lugar.
Para que las luces de Ubrique sean cada vez más luminosas los enamorados del pueblo trabajan constante e incansablemente, afanándose por resaltar lo mejor, por destacarlo e intentar arrinconar lo menos bueno. Unos escriben, otros bucean en la historia, otros pintan, otros trabajan, otros colaboran, otros son altruistas y solidarios, otros ensayan con ánimo, otros organizan. Y todos nos sentimos cada vez más orgullosos de nuestro pueblo cuyo renombre, aquí y en todo el mundo, cada vez es mayor, y donde cada vez nos buscan más por la calidad. Y nos sentimos felices cuando hablan de nuestra pintura (en este enlace) o cuando nos eligen para un documental o un programa de televisión por nuestros méritos.
Pero desgraciadamente en esta semana la imagen de Ubrique se ha ensombrecido terriblemente. Las imágenes de un toro exhausto, congestionado, asustado y derrotado tirado en nuetras calles después de haberlo correteado, entre los chillidos y los aplausos incomprensibles de una multitud; de un toro que no pudo levantarse más y tuvo que ser arrastrado al cajón; de un animal abatido en nuestro pueblo, han circulado por las redes sociales con la celeridad de un rayo. ( En este enlace en una página internacional).
Y los comentarios de ubriqueños y foráneos no se han hecho esperar. No podemos, por respeto, repetir aquí las frases que hemos podido leer, pero sí decimos que nos hemos sentido profundamente ofendidos, porque para quienes han visto a ese animal sufrir todos los ubriqueños somos iguales.
Y se borra de un plumazo todo el trabajo de tantos años, y volvemos a ser un pueblo retrógrado, ignorante y medieval, y de repente, las luces de Ubrique se oscurecen.
Y lo peor es que da igual lo que digamos o dejemos de decir, unos abanderan el insulto y la falta de respeto, otros politizan este drama, haciéndonos creer que se trata de historias de partidos; otros se encogen de hombros.
Y a nosotros, que aprendimos de nuestros mayores a querer a nuestros pueblo, a respetar a los vecinos, a buscar lo mejor de las personas dentro de cada uno, solo nos queda sentir mucha lástima, lástima por nuestro pueblo, deseando que estas sombras desaparezcan para siempre, deseando no volvernos a sentir obligados a abandonarlo para no asistir a este desatino, deseando que nuestros gobernantes reflexionen y se sensibilicen, deseando que Ubrique luzca como merece.
.
Otros despolitizan este drama, haciéndonos creer que se trata de historias poéticas, de luces y sombras, de decisiones de deidades implantadas ya en tres ediciones, de castigo divino; Como si los responsables y dirigentes del municipio no fuesen quienes aprueban esta vergüenza, como si no fuese una decisión política y social cuidar el nombre de nuestro pueblo que trasciende incluso a sus actuales ciudadanos, como si no hubiese plenos y partidos que aprueban o no esta vergüenza, como si la ocupación de nuestros gobernantes no fuese otra que posar para la foto cuando las propuestas son populares y apoyadas por unanimidad y, sin la responsabilidad de entender que hay asuntos y decisiones impopulares que recaen en manos de quienes decidieron presentarse a unas elecciones. Que al menos tengan la dignidad de mostrar la coherencia y el respeto que nuestro pueblo y época merecen.
ResponderEliminarYo me fui de las redes sociales por todo esto que nos relatas en este acertado artículo. Las sombras de las que hablas lograron ensombrecer mi entusiasmo por dar a conocer a todos el verdadero Ubrique. Y es que tal vez sea yo el que ha perdido la ilusión o tal vez sea Ubrique el que se ha convertido en algo que no merece la pena mostrar. Mientras los que levantan la mano en los plenos no sean conscientes de que la dignidad y el respeto están por encima de un puñado de votos, prefiero mantenerme al margen. Un afectuoso saludo querida amiga.
ResponderEliminarMuchas gracias. Tu razonamiento es muy interesante. Me gustaría que te identificaras para poder compartirlo en el blog. No acostumbro a publicar comentarios anónimos o de personas que no conozco si se trata de algún tema "espinoso".
ResponderEliminarUn saludo
Me llamo David Bulpe Solano
EliminarEs un día caluroso de agosto, paseo junto a mi familia por el campo, estoy feliz de vivir aquí, no necesito nada mas. De repente, de la nada, un grupo de personas se acercan con rapidez hacia mí. No se que ocurre, estoy muy desconcertado. Todo es de repente, muy rápido y violento. Atado con una cuerda me introducen a la fuerza en el interior de un enorme cajón, siento miedo, no entiendo nada. ¿Que está pasando?
ResponderEliminarEs un sitio oscuro se mueve con fuerza, casi no puedo mantenerme en pie. Mi corazón late con fuerza, no veo nada a mi alrededor, no se donde estoy, no se donde me llevan.
Pasadas unas horas y tumbado en el suelo oigo como de repente la puerta se habré con un ruido, chirriante y desgarrador. Aprovecho para salir huyendo, corro con fuerza sin mirar atrás, en mi paso me encuentro con cientos de personas, empujándome, chillándome, todos me miran y me gritan, siento pánico y sigo corriendo para escapar, apenas puedo defenderme, no logro escapar, y sigo corriendo. No se si es una pesadilla. Estoy fatigado, no tengo fuerzas para seguir, no puedo respirar, no puedo mas….
Hagamos esta visualización en nuestro interior; este ejercicio de acercarnos a sentir las emociones de otros seres se llama empatía.