Antonio Gutiérrez y María Remedios Izquierdo
Por Esperanza Cabello
Hoy hemos recibido una triste noticia, el fallecimiento de nuestro amigo Antonio Gutiérrez.
Antonio ha formado parte de nuestra familia en los últimos años. Desde que se afincó en Ubrique, procedente de la costa de Cádiz, Antonio se ha convertido en un ubriqueño de pro, participando en todo tipo de actividades y proyectos, siempre de forma voluntaria y mirando por los demás.
Lo conocimos hace más de una década, cuando llegó a Las Cumbres en nombre de Manos Unidas dispuesto a trabajar por los más necesitados y a buscar los apoyos necesarios. En la misma época llegó al ayuntamiento buscando cómo financiar y organizar el trabajo de la ONG, y allí se encontró con nuestra tía María Remedios, entonces concejala, y desde el primer momento se convirtió en su compañero de vida.
En estos años hemos visto a Antonio emulando a Cervantes, fomentando la lectura, dando conferencias en los centros educativos, recabando firmas para nombrar a don Bartolo Hijo Predilecto o a don Manuel Hijo Adoptivo, recaudando fondos y haciento todo tipo de actividades solidarias.
También creó, junto a otros amigos, el club de cine Cineando, del que ha sido el presidente y en el que ha colaborado activamente durante muchos años.
Para nosotros, como parte de nuestra familia, fue el mejor compañero del mundo de nuestra tía María Remedios, acompañándola en todos los momentos difíciles y siendo siempre un señor, con ella y con todos nosotros, y ganándose el cariño y el respeto de su familia; nuestra prima Natalia nos dijo hace unos días que había ido a visitarlo y lo había visto muy decaído, pero no pensábamos que su enfermedad pudiera tener este desenlace fatal, hoy estamos todos tristes con su pérdida, sabiendo que lo vamos a echar de menos.
Nuestro cariño y un gran abrazo para sus hijos, a quienes quería tantísimo y que han sido siempre su apoyo y su ilusión. Una gran familia. Lamentablemente en estos tiempos las circunstancias de la pandemia no nos permitirán acompañarlos ni despedirlo como sería nuestro deseo.
Descansa en paz, amigo Antonio, siempre has sido un gran hombre.
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Me deja un maravilloso recuerdo de mi trayectoria profesional en Ubrique. Desde que le conocí conectamos y cuando se hizo pareja de Maria Remedios me alegré mucho, la felicidad y conexión que tuvieron transcendia... Fue una buena persona, un excelente cuidador siempre atento y cariñoso. Que descansen en Paz y ojalá que si existe otro plano, sus energías se encuentren.
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