Los Canastos de Reyes de Ubrique

 

Canastos de reyes en fabricación

Todo estará listo para la noche de mañana

Por Esperanza Cabello

Todos los ubriqueños, nativos o de adopción, sabemos que existe una genuina tradición popular para estos días de fiestas familiares y tradicionales: Desde que nuestros mayores tienen memoria, se fabrican unos pequeños canastos de reyes en modestas cajas de cartón, decoradas con papel de seda, almidón y lazos.

Es normal que en un pueblo artesano y creativo continuemos con esta tradición, en cada casa hay suficiente material para fabricarlos (con una caja de zapatos y unos pliegos de papel es suficiente), y además en estos días tan familiares se refuerzan los lazos de abuelos y nietos, de padrinos y ahijados, de tíos y sobrinos y es normal echar un ratito con la ilusión de crear un bonito canasto para las chucherías de reyes.

Por cierto, que nuestra madre comenzó también la costumbre de regalar un rocón de reyes casero a sus ahijados, y nosotros hemos continuado esta tradición con los deliciosos roscones artesanos que se fabrican en las confiterías de Ubrique.

En estos quince años hemos hablado muchas veces de los canastos (pinchando en este enlace podemos leer cómo se hacen, cómo llevamos la tradición y cómo los mayores los recuerdan con cariño). Para nosotros tienen un significado especial los recuerdos de nuestro tío Pepe (en este enlace), la "receta" de los canastos de nuestros amigos Luis Crossa y María Isabel (en este enlace) o los buenos ratos canasteros con nuestras sobrinas pequeñas (en este otro enlace).

Desde el año pasado hemos tenido la grandísima suerte de poder fabricar canastos para nuestros nietos, y aunque aún son muy pequeños para poder echar una manita, no perdemos la ilusión de tenerlos preparados para mañana, y aunque vamos con un poco de retraso , seguro que en la noche de Reyes los canastos de Luna y Manuel lucirán muy coloridos encima de la alfombra, junto a sus zapatitos. Seguro que sus majestades sonreirán al comprobar que las tradiciones ubriqueñas se mantienen y que el vínculo familiar sigue siento tan dulce como siempre.

Así que a esperar con ilusión esta noche mágica. Aprovechamos para recordar a los más rezagados que aún tenemos mucho tiempo para preparar los canastos de reyes de nuestros pequeños.

¡Felices Reyes Magos a todos!

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