miércoles, 22 de junio de 2016

Los noques de una curtiduría





Patio Santa Ana. Ronda
Gentileza de Antonio Valle

Por Esperanza Cabello

Si algún día fuéramos a Ronda, tendríamos la oportunidad, además de recorrer una de las ciudades más alucinantes de la Serranía, de conocer de cerca lo que fue en su día una curtiduría.
Aquí, en Ubrique, han prácticamente desaparecido los vestigios de las muchas curtidurías que existieron desde hace mucho tiempo, y necesitaríamos unas excavaciones arqueológicas en el Rodezno o junto al río Ubrique para encontrar los restos de los noques.
Pero en Ronda, entrando por el patio Santa Ana, están a la vista los noques de una antigua tenería, incluso podemos fotografiarlos desde el puente. Se trata de una tenería bastante grande, pues hay un buen número de albercas (noques). Y precisamente se encuentra en un barrio que tomó su nombre de la actividad que en él se desarrollaba, según se desprende de esta antigua postal (de 1949).

Ronda, Barrio de las Peñas, Olierias y Tenerías, 1949
De todocolección



Así que, si algún día vamos finalmente a Ronda, tenemos una visita  imprescindible que hacer, una vez que hayamos saludado a nuestros tíos Pepe y Carmen, claro, iremos a hacer unas fotografías más de cerca a esta antigua tenería, para saber cómo eran los noques, qué tamaño tienen y cómo están distribuidos.
Hoy hemos sabido también que en Sedella, pueblo de origen de todos los Cabello de la familia, se conservan, como vestigios arqueológicos, las antiguas curtidurías (en este enlace).
Realmente es un lujo que se conserven aún estas estructuras.











.

No hay comentarios: