Este blog, que comencé en 2007, es un homenaje a mis padres, Manuel Cabello Janeiro y Esperanza Izquierdo Fernández, a su vida y a su trabajo. Quiero recuperar sus escritos, sus investigaciones y muchos de sus recuerdos. Al mismo tiempo es un amable homenaje a todos los miembros de nuestra familia y a nuestro pueblo, Ubrique, para que no se pierda la historia de los que nos precedieron y podamos recuperarla entre todos. Gracias
sábado, 8 de marzo de 2025
sábado, 1 de marzo de 2025
Recordatoria de Paquito y Esperancita Izquierdo Fernández
Estampita de Primera comunión de nuestra madre.
Ubrique, 8 de septiembre de 1939
Por Esperanza Cabello
Hoy hemos tenido una alegría muy grande, nuestro amigo Ramón Flores ha venido a traernos un obsequio, después de dar mil vueltas en su bolsa, encontró por fin lo que estaba buscando y tenía guardado para nosotros desde hace unos días.
¡Una preciosa estampita de primera comunión de nuestra madre y nuestro tío Paco!
Recuerdo de la Primera Comunión de Paquito y Esperancita Izquierdo Fernández, celebrada el 8 de septiembre en la parroquia de Nuestra Señora de la O. Ubrique, 1939.
Libros El Salvador. Sevilla
Ha sido una grata alegría, un precioso recuerdo que no sabemos cómo agradecerte, Ramón.
Los dos hermanos mayores hicieron la comunión el mismo día. En principio, nos llamó la atención la fecha. El 8 de septiembre no es día de comuniones, precisamente, sino el de la Patrona, y suele celebrarse esta festividad en exclusiva.
Pero después nos hemos fijado en el año, 1939, justo al acabar la Guerra Civil, y hemos supuesto que fue el primer momento que nuestra abuela tuvo para organizarlo todo.
Y es que en 1936, con la sublevación y el principio de la guerra, nuestro abuelo Leandro, su marido, fue encarcelado en Madrid y allí estuvo, en la Modelo, durante todo el tiempo que duró la guerra. En Ubrique pocas noticias se tenían de él, primero que lo habían fusilado en el 38, después que seguía en la cárcel y con tuberculosis, después sin noticias. En este enlace podemos leer más detalladamente la increíble historia de su "doble muerte".
Hasta que al terminar la guerra nuestro bisabuelo Francisco se fue a buscarlo a Madrid, aprovechando que el camión de Román iba a la capital a llevar pan, y milagrosamente se encontraron padre e hijo en Valladolid. Al llegar a Ubrique, ya casi verano, toda la familia se sobresaltó al ver llegar a aquel hombre alto, delgadísimo y demacrado, doblado por el peso de las atrocidades de la guerra pero feliz de volver a casa y dispuesto a rehacer su negocio.
Natalia habría esperado su recuperación y, terminado el verano, que pasaron en la finca de unos amigos cerca de El Bosque para que Leandro se repusiera, decidieron que los niños harían su Primera Comunión un día muy señalado, el día de la Patrona.
Muchísimas gracias, Ramón, por este precioso e inesperado regalo que tantos recuerdos nos ha traído. ¡Cómo echamos de menos a nuestra madre y sus preciosas historias que casi hemos olvidado! Esta estampita nos ha recordado muchas de ellas. Gracias💜💜