viernes, 11 de abril de 2014

El concurso de gañotes de Ubrique

 Concurso de gañotes de Ubrique
Este año con los premios se entregarán trofeos autóctonos
Elaborados por Leandro Cabello


Por Esperanza Cabello
Fotografías: Leandro Cabello

Esta tarde, como cada viernes de Dolores desde hace casi una década, se ha celebrado el concurso de gañotes de Ubrique (aún lo siguen llamando "gañotada" ¡qué le vamos a hacer!). En principio estaba previsto que fuera a las cinco de la tarde, pero la llegada de las cámaras de Canal Sur ha hecho que todo se desarrolle un poco más lentamente.



A las cinco y media empezaron a llegar los primeros inscritos, hemos echado en falta a algunos de los "compañeros" de concurso de años anteriores,  pero hemos vuelto a ver presentaciones tradicionales y sencillas, como nos gustan: un canasto, un lebrillo, una bandejita, un trapito de cuadros o de encajes y algunas cañas y limones. Nos ha gustado sobre todo la bandeja de corcho, deberían haberle dado el premio a la originalidad y a la presentación tradicional.




La verdad es que a nosotros nos gusta especialmente lo tradicional, como estos gañotes tan bonitos, tan bien hechos; presentados en ese lebrillo antiguo con sus limones tan vistosos y tan bien hechos. 



Porque lo bueno de las tradiciones es, precisamente, eso, que son tradiciones, y se busca preservarlas, continuarlas y mostrarlas a todos, intentando que la gastronomía de nuestra tierra sea un nuevo aliciente para los ubriqueños y los visitantes.
Estos gañotes y su presentación nos han parecido espectaculares. Sabemos, por experiencia, lo difícil que es conseguir que los gañotes se queden tan bien hechos, de un color tan uniforme y tan redonditos. Desde luego, alabamos la habilidad  del gañotero o la gañotera. En realidad no sabemos quién los ha hecho, pero le damos la enhorabuena.






El jurado lo ha tenido difícil este año, como casi siempre por otra parte. A cada uno le gustan sus gañotes, los de su madre o los de sus abuelas. Y si en casa se hacen con canela, pues ese será el sabor que se busque; o si nuestra madre los hacía muy esponjosos, esa será la textura que más nos llame la atención.
De todas formas tienen que puntuar la presentación, la textura y el sabor. Durante un buen rato han ido probando pequeños trocitos de gañotes de los presentados y después han ido a la puesta en común para decidir quienes serían los ganadores.



Mientras, el público  asistente empezó a degustar gañotes y chocolate, esperando a que se entregaran los premios a los ganadores. Al mismo tiempo, las cámaras de Canal Sur iban enfocando al público, y hemos podido oír a nuestro paisano Modesto Barragán dirigirse a Isabel Muñiz, a la que todos los ubriqueños de muchas generaciones conocemos porque tenía su quiosco de chucherías precisamente aquí, en la Plaza, a la derecha de la fotografía. En esta foto Isabel está a la izquierda, en la barra.



Y llegó el momento de entregar los premios. Este año, además del  premio en metálico y el diploma, se han entregado a los tres primeros premios unos trofeos artesanos, elaborados por nuestro hermano Leandro, con gañotes y una imagen de nuestro pueblo sobre un trozo de madera.
Un lujo representativo de Ubrique. 
También se repartieron pins con un gañote enrollado en su caña, elaborados igualmente por nuestro hermano Leandro. A los que no han podido hacerse con uno de ellos, o a los que quieran imanes de nevera con el San Antonio o con gañotes les recomendamos que los busquen en La Trastienda, la tienda de las plantas de la avenida de España, mañana, cuando vayan a comprar sus macetas o sus planteras.




Y llegó el momento de los premios. Al mismo tiempo que en Andalucía Directo el presentador hablaba con Jesús, flamante ganador del tercer premio,  lo felicitaba por sus gañotes y nosotros fotografiabamos nuestro televisor ...



 Nuestro hermano Leandro fotografiaba a Jesús en directo, mientras explicaba cómo había hecho sus gañotes este año.




Jesús había presentado  gañotes rellenos de chocolate. Nos contó que había decidido innovar y que había pensado en rellenarlos. Con mucha paciencia y una jeringuilla pastelera había ido poniendo chocolate en el interior de cada uno de ellos, después unos minutos al frigorífico y nada más. Deben de estar muy buenos. ¡Felicidades, Jesús!

Nosotros particularmente preferimos los gañotes tal cual, sin rellenos ni aditivos, según nuestra tradición, sin cabello de ángel, sin chocolate, sin nata, sin crema pastelera y sin nada. 
Nuestra única innovación en todos estos años ha sido intentar hacer gañotes para celíacos (en este enlace), pero eran muy poco presentables; eso si, deliciosos, pero muy feúchos. 
Aunque entendemos que la innovación es interesante, para los comercios, las pastelerías, los hosteleros, las panaderías... pero los gañotes tradicionales, nos gustan tradicionales y caseros. 
De todas formas  el jurado ha premiado la novedad, y el primer premio parece más el producto de un profesional pastelero, ya que son gañotes con nata en el interior, chocolate en los bordes y unas letras de chocolate con el nombre del pueblo en los aros del gañote. Un dulce estupendo, sin lugar a dudas, pero ya no es ni casero ni tradicional.



Y por fin llegó el momento de los premios, se entregaron los títulos, los diplomas y los trofeos


 La segunda clasificada
¡Enhorabuena a todos los participantes y, por supuesto, a los ganadores!




Y el equipo de repostería andalusí gañotero este año no ha participado con gañotes
Pero sí con trofeos, con difusión  y con fotografías
Así que no hemos dejado la tradición de fotografiarnos para la ocasión





Y ya saben, si quieren degustar estos exquisitos dulces tradicionales, no dejen de venir a nuestro pueblo en estos días. Se hacen en cada casa, en cada molino, en cada panadería. Los gañotes de Ubrique son uno de nuestros tesoros culinarios.
Y si no se trata de comerlos, siempre pueden llevarse un pin ubriqueño de recuerdo.

(En este enlace podremos leer todos los artículos sobre gañotes que hemos escrito en los últimos años)


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1 comentario:

Anónimo dijo...

Por lo menos podias haber publicado el mensaje para que la gente que lea el tuyo se entere de que va la cosa. Eso demuestra que lo que para ti prevalece es tu opinión, no tienes en cuenta la de los demás, ahí es donde reside la falta de respeto y la falta de imparcialidad, que por mucho que te lo explique jamás entenderás.
Fernando Márquez