jueves, 2 de abril de 2015

1934, calentando motores para el turismo en la provincia

 Listado de alojamientos en la provincia de Cádiz, 1934
Guía del Turismo de la Provincia de Cádiz

 Por Esperanza Cabello

        Hemos tardado muchos años en decubrir que el turismo era una gran fuente de ingresos y de promoción para nuestra tierra. Las temperaturas fantásticas, las buenas comidas, las ofertas culturales y naturales de nuestra provincia son, sin lugar a dudas, las mejores que se podrían desear.
Pero ya hace muchos años que hubo intentos por estructurar y difundir esta fuente de recursos. El ejemplo más claro está en la "Guía del Turismo de la provincia de Cádiz", publicada en 1934 y que podemos consultar en la Hemeroteca Digital de la Biblioteca Nacional de España.
Nos ha encantado ver cuáles eran los establecimientos hoteleros de la época, y más aún leer los nombres de las fondas de Ubrique: "Fonda del Comercio" y "Fonda los Pilares".
Ubrique, debido sobre todo a las características de su industria, siempre ha dispuesto de buenas pensiones y buenas fondas.
En los años setenta tuvimos nuestro primer hotel: el Hotel Ocurris, fue la primera época de oleadas turísticas de nuestro pueblo, cuando empezó a hacerse más famoso aún con el auge de la marroquinería y con la publicidad que el programa de RTVE "Misión Rescate" y los muchos premios ganados por el grupo 208 con su maestro-jefe Manuel Cabello Janeiro.
Actualmente también contamos con el Hotel Sierra de Ubrique, con un buen montón de alojamientos rurales y con algunas de las pensiones de siempre.


Pero el esfuerzo de agrupar los recursos hoteleros en 1934 representa un gran mérito y una buenísima idea para la época. Del mismo modo, en esta Guía del Turismo, hemos encontrado publicidad de varios muchos comercios de la provincia, aunque, lógicamente, hay una publicidad que nos ha llamado más la atención:


Manufactura de Artículos de Piel
Diego León Arenas

Se trata de la publicidad de la fábrica de Diego León Arenas, en la calle Sagasta (actual calle Botica). "Gran manufactura de artículos de piel, las mejores calidades y la mayor solidez en la fabricación".
Ya habíamos encontrado publicidad de esta misma fábrica en 1924:




Por lo que suponemos que este fabricante apostaba fuerte por la difusión y la publicidad de sus productos, pues no era habitual encontrar publicidad de este tipo en esas épocas.
Nos llama la atención que en el anuncio de 1924 se anuncia como una "Fábrica de Petacas, Carteras y Monederos, especialidad en artículos de gran fantasía".
En esos diez años la fábrica de petacas con artículos de gran fantasía pasó a ser gran manufactura de artículos de piel con las mejores calidades. Está claro que hubo que ir adaptándose a las nuevas épocas y que Ubrique, como siempre, fue capaz de ir reinventándose a sí mismo.


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1 comentario:

Francisco Javier Sánchez Pozo dijo...

Yo conocí a Diego León. Estaba casado con Rosa Carrasco, y vivió en la calle Sagasta, número 8. Es decir, que lindaba con mi casa. Tanta era la amistad entre las dos familias que hubo un tiempo en que se comunicaban ambas casas por su interior, y una de las hijas de Diego León, Rosa León Carrasco, y mi madre se criaron como hermanas. Diego León tuvo cinco hijos, tres hombres y dos mujeres. Los varones se llamaron Pepe, Francisco y Manolo (sacerdote que llegó a canónigo de la catedral de Sevilla después de haber ejercido su ministerio en Málaga).
Y de las dos mujeres, una de ellas murió joven dejando un hijo que fue criado por sus abuelos y su tía Rosa. Diego se vino a vivir a Sevilla una vez que quitó la fábrica y vendió la casa vecina a la nuestra, pero nunca dejamos de tener contacto con ellos. Manolo, el sacerdote, bautizó a mi hijo el mayor en la iglesia de San Gil (Macarena), y cada año iba a Ubrique, al igual que su hermana Rosa, en varias ocasiones sobre todo en la novena a la Virgen, y se hospedaban en una casa que tenían nada más comenzar la subida a la calle Culito por calle Saúcos. Es más, tenían un patio que daba a esa acalle. En fin, que me ha traído un montón de recuerdos esta entrada por la estrecha relación que hubo entre las dos familias.