martes, 22 de junio de 2010

Aquellos juegos infantiles..."Jugar a los güesos"

Unos preciosos albaricoques
O amascos, como decimos en Ubrique


Nuestro tío Javier nos ha hecho una magnífica sugerencia: se trata de un tema al que aún no hemos dedicado ninguna entrada y que ha ido uniendo a todas las generaciones de ubriqueños desde el principio de los tiempos: los juegos infantiles.
Vamos a hacerle caso y dedicar a este tema tan interesante, entretenido e importante el lugar que merece entre los recuerdos de todos nosotros.

Hoy empezamos con las palabras de Javier: "Jugar a los güesos"
"Es un juego que teníamos de pequeños: jugar con los huesos de los albaricoques. Estábamos deseando que nuestros padres compraran dicha fruta para poder ir a jugar a la calle, trato de recordar que se lanzaban sobre la pared y el que le diera a los que ya estaban en el suelo, los cogía todos.
Supongo que este juego ya se habrá perdido. Eso sí, íbamos a nuestras casas hechos un cristo de sucios.
Tambien jugábamos a los "bolindres" y las niñas a "las estampitas", valga para el recuerdo.
Un abrazo,
Javier"


Huesos de albaricoques
Un preciado juguete de antaño

Yo recuerdo que esperábamos al postre de los veranos para coger los huesos de los amascos e ir a una acera a raspar una parte hasta hacerle un pequeño agujero. Después lo vaciábamos y con él hacíamos un silbato (un pito, en ubriqueño), con el que dábamos convenientemente la tabarra a los mayores que dormían la siesta.
Afortunadamente para ellos, era muy difícil lijar el hueso hasta hacerle un agujero apropiado, así que la tarea duraba casi toda la siesta.


Si quieren contarnos cómo eran sus juegos de pequeños, estaremos encantados de contar con su colaboración.

Esperanza Cabello

3 comentarios:

maile dijo...

De mis años infantiles recuerdo poco, y no se por que, porque si que recuerdo que fueron felices.
Hoy me habeis traido uno entrañable.
Nunca hice un "pito" con los huesos, pero si que recuerdo que los huesos eran la moneda para jugar al "cinquillo"... nuestra moneda. Los huesos de frutas o las legumbres secas eran nuestras apuestas en las tardes de verano.

Hacia mucho tiempo que no recordaba esto. En mi tierra tambien los llamamos "amasquillos".

Leandro dijo...

Lo que tenian en común estos juegos era lo económicos que eran pues con un platillo un tapón de tio Pepe o una caja de pastillas Carmina teniamos suficiente para pasar la tarde, incluso las perlas salian de las botellas de licor irrellenables.

Mariángeles dijo...

Me ha gustado el tema, estaría bien poder ir unos minutos a aquellos tiempos y sentir las sensaciones de entonces.
Sobre todo la emoción de ir ganando y el suspense cuando los demás tiraban. Ahora cuesta un poco más emocionarse.
Besos a todos!