domingo, 27 de julio de 2014

La boda de Paco y Fernanda

Precioso cuadro de punto de cruz realizado con todo cariño para la ocasión



Por Esperanza Cabello
Fotografías de Julia, Fran, María, Luis, Esperanza, Julia, Eduardo, Manolo... y unos cuantos más



El viernes, 25 de julio, tuvo lugar un acontecimiento muy esperado en la familia: nuestro primo Paco se casaba felizmente con Fernanda Raspanti, una joven argentina que ha llegado a su vida dispuesta a hacerlo muy feliz.
Paco y Fernanda han preparado su boda en Ubrique, lugar de nacimiento del novio, con mucha ilusión. La casualidad ha querido que la novia fuera originaria de la localidad argentina Remedios de Escalada, junto a Buenos Aires, y la patrona de su pueblo es también Nuestra Señora de los Remedios, así que elegir la ermita del convento de capuchinos de Ubrique ha sido algo más que casualidad.


 El novio y la madrina, su hermana Ana María, a la llegada al templo


Como es habitual, hace muchos meses que  la familia está organizando todos los preparativos, y a nosotros nos hizo especial ilusión sentir la felicidad y la alegría de la pareja cuando vinieron a invitarnos. Paco quería contagiar su felicidad a todos, quería que nos sintiéramos bien, quería que todos lo celebráramos y hacer "un gran fiestorro".
Y así ha sido. La tarde comenzó con muchos nervios y últimos detalles. El novio llegó puntual a la cita acompañado por su hermana y madrina (guapísimos y muy sonrientes los dos). Nos llamó la atención la flor de su solapa: de algodón. Después veríamos que el ramo de la novia también estaba hecho con flores y algodón.


Novio y madrina ante el altar, esperando felices a la novia.
Ana estaba espectacular y preciosa



Toda la familia del novio estaba ya esperando en el interior del convento, sus sobrinos Luz María y Jacob iban a hacer las lecturas, Natalia Raspanti cantaría para los novios y todo el templo estaba decorado con flores y velas.
Poco a poco los invitados se fueron colocando mientras esperaban a la novia.

La novia y su padrino, su querido hermano, a la llegada al templo


La novia llegó del brazo de su padrino y hermano, visiblemente emocionada y feliz. Son momentos muy emotivos e inolvidables, y precisamente en esos instantes recordamos a nuestros seres queridos, evocamos los lugares, las personas, los acontecimientos de toda una vida...
De todas formas la magia de esos minutos envuelve a todos y la celebración se convierte en festejo en todos los casos, y esta boda ha sido una verdadera celebración.


La llegada llena de ilusión al altar. Toda la familia esperaba emocionada



Momentos de emoción y felicidad



Por fin, los anillos



El momento de las firmas. Ya son marido y mujer

Durante todo el tiempo hubo muchísimos detalles que nos hicieron pensar en el cariño y en el mimo con el que han sido pensados: el cuadrito de punto de cruz anunciando al boda (es la primera fotografía de la entrada); los abanicos para el calor; la música -fabulosa- de Puccini, Grieg, Schubert, Piazzola, Haendel; el Ave María que cantó Natalia, la hermana de la novia, dejándonos embobados a todos; los cartuchos de arroz envueltos en partitutras; los pajaritos de papel; los bastidores con los números de las mesas; los carteles y las explicaciones; los regalitos...



Comienza el reportaje de bodas
(Esperamos poder añadir algunas fotos)


A la salida del templo, y tras la lluvia de arroz (nos encantará ver esas fotos), hubo momentos muy emotivos. Las dos familias felicitaban a los recién casados y comenzaron los saludos. Personalmente, fue uno de los mejores momentos: poder ver y saludar a los primos y a los tíos, reunirnos con los amigos, reirnos, comentar, hacernos fotos.
Una de las mejores cosas de las bodas familiares es que conoces a casi todos los invitados y da mucha alegría poder saludarlos.
Lamentablemente el mismo día de la celebración había tenido lugar el entierro de Eduardo Janeiro Esquinas, primo hermano de nuestro padre, y todos estábamos consternados con esta terrible noticia. Muchos de los asistentes habíamos sido compañeros de juegos de la infancia y de la juventud de Eduardo, y su recuerdo estuvo con nosotros todo el tiempo.



Los hermanos Cabello, emocionados y felices, recordando en todo momento a los que no están

También estuvieron en el recuerdo de todos Manolo, Julia, Joaquina, Antonio, Manuel Heliodoro y  Pepe, sobre todo cuando, como en todas las celebraciones, se reunieron los hermanos y los cuñados para las fotos de rigor. 
Pero era día de celebración, y teníamos la seguridad de que para ellos también habría sido motivo de celebración ver a Paco y a Fer tan felices.



Toda la familia se arremolina alrededor de los recién casados para las fotografías



Finalmente, como somos tantos, Luis va haciendo las fotos pacientemente



Nuestro tío Pepe, rodeado por algunas admiradoras



Los primos se reúnen en el atrio de la iglesia

Entre los momentos de alegría, ver a nuestros primos y a nuestros tíos tan bien dispuestos, tan guapos y tan elegantes. Somos unos privilegiados por tener esta gran familia y por ser de una rama "familiera" y divertida.


Llegando al Cortijo barranco, Ana María y Remedios se disponen a festejar el evento

El banquete de bodas era en el Cortijo barranco, en Arcos. Es un magnífico cortijo reconvertido en alojamiento rural, profusamente decorado con detalles antiguos y en el que no faltaban los objetos de hierro típicos de las tareas agrícolas ni magníficos detalles de piedra, barro y mármol.
Los detalles siguieron toda la noche, y no faltó la música, la comida y la bebida en ningún momento.


Los tres hermanos Cabello elegantes y felices



Toda una vida juntos, son personas extraordinarias.

En el patio interior del cortijo nos reunimos todos los invitados esperando a los novios, que no se hicieron esperar. Después del reportaje fotográfico que se hicieron en varios lugares de Ubrique llegaron al cortijo, dispuestos a celebrar su felicidad con todos nosotros.



Fer, muy emocionada, recibe los parabienes de toda la familia


Pasados ya los primeros momentos de nervios y de ajetreo, Fer y Paco recibieron las felicitaciones y los regalos de la familia. Los veíamos felices y contentos, satisfechos de haber reunido a sus familias y tranquilos de ver que todo iba  bien.


Los novios leen las felicitaciones de sus familiares


Juntos leyeron los mensajes de felicitación y recibieron algunos regalos, entre ellos había uno pensado expresamente para ellos: Paco nació  en la plaza de la Verdura de Ubrique, y  es uno de los pocos ubriqueños vivos que han nacido en este lugar tan emblemático de nuestro pueblo.
Así que habíamos elegido una antigua imagen de la plaza y nuestro amigo José Antonio Martel había plasmado esa imagen en un lienzo  para la pareja. 
Los detalles continuaron durante toda la noche.


Un regalo muy especial: la Plaza de la Verdura en los años sesenta.
Paco es uno de los pocos ubriqueños vivos nacidos en la Plaza de la Verdura



Paco y Fer con los hermanos Cabello Izquierdo


También llegó el momento de las fotos con los novios, esperamos ver el reportaje completo, pero mientras nos tendremos que conformar con las fotografías que unos y otros fuimos haciendo de los momentos más destacados de la noche.
Después: el banquete. Parrilla argentina, en honor a la novia y a sus orígenes.
Nosotros tuvimos la suerte de compartir mesa y vecinos con primos y hermanos, y nos reimos tanto con las ocurrencias de unos y de otros que nos acordamos de nuestra infancia, cuando no podíamos parar de reir .



En pleno banquete: los novios van a cortar la tarta nupcial mientras que Remedios y Carmen 
se protegen del frío con unos "pañuelos" muy originales


Cuando pensamos en una boda a finales de julio en Andalucía seguro que se nos pasan por la mente imágenes de mucho calor, pero la verdad es que fue todo lo contrario, estuvimos muy fresquitos, demasiado, quizás. Para algunos era una temperatura ideal, pero para otras la temperatura iba bajando tanto qu etuvieron que echar mano de algunos "trucos" caseros. Fue muy divertido ver a nuestras tías utilizando con mucho estilo las servilletas para protegerse el cuello. 
Y más divertido aún fue ver cómo algunas de las invitadas improvisaban unos estupendos chales...


Las invitadas comparten el modelo de "chal" muy gustosas

...para protegerse del frío. Las fundas de las sillas sirvieron estupendamente para este cometido, pero también algún que otro mantel fue utilizado con este fin.
Pero como el cortijo es un lugar con muchos recursos, decidimos continuar con la fiesta en uno de los patios, resguardados, y allí comenzó, para alegría de todos uno de los momentos más divertidos de la noche.

El carnaval carioca, según los gustos de la novia: lo más divertido

De pronto Fer apareció con bolsas de fiesta: íbamos a hacer un guiño al carnaval carioca. Gorros, antifaces, trompetas, labios, chicharras, bongos, maracas, pitos, anillos luminosos, gafas brillantes... Mayores y pequeños empezaron a bailar, a cantar y a celebrar felizmente el acontecimiento.
 


Baile, banquete y carnaval: unimos fiestas y tradiciones
Nuestros dos primos pequeños, de lujo


Todos los invitados disfrutamos de lo lindo con el "fiestorro", según expreso deseo de los novios


Y aquí termina la crónica de esta boda tan especial y tan divertida. Quisiéramos agradecer a Fer y a Paco que nos hayan invitado a compartir estos momentos inolvidables y que nos hayan permitido disfrutar de su compañía y de la de toda nuestra familia.
También queremos desearles toda la felicidad del mundo, y esperar que la vida les sonría constantemente. Y, como diría Manuel...


¡Que vivan los novios!


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1 comentario:

Ubrique en verde dijo...

¡Pues sí que lo pasamos bien! ¡Fue una boda que no se olvidará tan fácil!