Los Peleteros del Salto el Pollo, 1987
con sus trajes de prehistóricos
con sus trajes de prehistóricos
Por Esperanza Cabello
Corría el año de 1987, y por fin, después de tantos y tantos años de prohibición y de tapujos, se celebraban en Ubrque los primeros carnavales oficiales.
Un grupo de amigos, con muy buenas artes, buen oido, buena disposición y mejor humor, se dispusieron a crear una chirigota que fue, para todos, alucinante, por el tipo, por las letras, por la música y por el arte.
Sus letras fueron dedicadas a ubriqueños y a ubriqueñas, a la "calzá", recién encementada, a la plaza del pueblo "esta plaza es una porquería, no la queremos", al kiosco de Isabel ("la Bartola"), al Chiriguay, a la marroquinería...
Nuestros dos hermanos, Leandro y Manolo, eran miembros de este grupo junto a dieciocho amigos más, y entre todos fueron componiendo el tipo, la música, las letras, las ideas...
Nuestros dos hermanos, Leandro y Manolo, eran miembros de este grupo junto a dieciocho amigos más, y entre todos fueron componiendo el tipo, la música, las letras, las ideas...
Pegatina de la Chirigota, diseño de Álvaro Gómez
(conservada después de 25 años ppor Manuel Cabello)
(conservada después de 25 años ppor Manuel Cabello)
La suya fue una historia muy curiosa. Unos amigos ubriqueños decidieron que iban a participar en los primeros carnavales oficiales. Empezaron a pensar el tipo, tenía que estar relacionado con la marroquinería y con nuestra historia. Pensaron que de prehistóricos podrían matar varios pájaros de un tiro, pero un golpe de suerte les dio la idea definitiva: una fábrica tiró 21 rollos de piel deteriorada, y uno de los peleteros pasaba por allí en el mismo momento: ellos eran 21, así que ya tenían el traje de prehistóricos.
Uno de los ensayos, con Ester, Álvaro, Manolo, Carlos, Leandro...
Leandro haciendo sus pinitos con el bombo
Leandro haciendo sus pinitos con el bombo
Ester, que aún no había cumplido los diez años, se unió al grupo con tanto entusiasmo como los mayores, seguramente sea la primera ubriqueña carnavalera de esta época moderna, sabemos de mujeres que habían hecho letrillas de carnaval, como Candelaria la Zapatera, pero no de mujeres que cantaran en una chirigota.
Para ella también había un traje de prehistórica. Ella además tenía la piel más "clara" (de los 21 fardos uno era más claro que los demás), y un precioso hueso en su peinado, como "las niñas prehistóricas".
Los peleteros prehistóricos en su hábitat natural
Y... ¿Cómo hacer un traje de prehistórico? Pues muy fácil: unos pelos alborotados, unas barbas muy pobladas, unas piernas "de ensueño", con unos leotardos de lana color piel al que cosieron unos "peláncanos negros horrorosos" (a modo de "hoy no me he depilado"). La piel cosida alrededor y unos cuantos complementos muy adecuados: huesos, un hacha de piedra, unos mazos de gomaespuma, unos pitos de carnaval y eso era todo.
Una de las actuaciones, en pleno carnaval
La peleterita, la chirigotera más pequeña de la época
(sigue sabiéndose todas las canciones)
Nuestra sobrina Ester, la peleterita, nos ha traido estas fotografías de aquellos años, y nos ha cantado, con Manolo y Natalia, algunas de las letras de entonces. No tienen ningún desperdicio, son críticas, ácidas, tiernas y muy entrañables al mismo tiempo. Traeremos las dos dedicadas a dos ubriqueños en los próximos días, porque merece la pena que se conserven.
Los Peleteros del Salto el Pollo en la sierra
Un tarzán peletero
con su traje de prehistórico
con su traje de prehistórico
Sabemos que en aquellos años hubo un magnífico movimiento carnavalero, que no tiene nada que envidiar al actual, con letras muy buenas, tipos estupendos y mucha pimienta. A los Peleteros del Salto del Pollo les sucedió "En Ubrique, la mala mosca te pique"...eso será para otra ocasión.
.
1 comentario:
Para despedir el carnaval fuimos al salto del pollo como se ve en las fotos y nos zampamos un jamón, se puede decir que fue el entierro del Jamón jeje.Tambié para teñir las camisetas subimos al Ubrique alto y si hubiera habido un jamón, también habria caido, que los años de crecimiento se pasa mucha hambre.
Publicar un comentario