Por Esperanza Cabello
Echar un vistazo en las librerías de viejo es siempre una lotería, nunca se sabe lo que se puede encontrar, y, aunque normalmente no hay mucho que hacer, de vez en cuando hay documentos sorprendentes y curiosos.
Para muchos de nostros puede parecer muy reciente, pero una carta comercial de 1955, con solo sesenta añitos, es casi una antigüedad.
Se trata de una carta de la empresa de Diego Yuste Nuñez a las bodegas Valdespino, pidiendo que descuenten el importe de cuatro garrafas vacías (antes se devolvían los "cascos" de las botellas, se era más ecológico) que tenían a su disposición en el local.
Lo verdaderamente curioso es el membrete de al carta comercial, con la imagen del cine Alcázar a la izquierda (el local de verano) y con el nombre del Salón Siglo XX a la derecha (el local de invierno).
El Salón Siglo XX fue el primer cine cerrado de Ubrique, en los años 30 (al principio, en los años 20 se proyectaban las películas en la Plaza, sobre la fachada de la Iglesia), estaba en el número 16 de la calle San Francisco, y tenía los techos ricamente pintados, como si se tratara de una capilla.
En un solo trozo de papel hemos encontrado un buen trozo de la historia de Ubrique, de dos salas de espectáculo que han acompañado a muchas generaciones de ubriqueños y ubriqueñas en los últimos setenta años.
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